La casa francesa presentó la colección Crucero 2019 en el Grand Palais de París este jueves. Como en todos los desfiles de Chanel, los escenarios se suelen robar todas las miradas y en este pasó exactamente lo mismo. Hemos visto cómo el diseñador alemán nunca para de idear nuevos sets para sorprendernos, ya sea con un aeropuerto, supermercado, casino e incluso una estación espacial con un cohete a punto de despegar, pero jamás íbamos a imaginar que esta vez la escenografía iba a ser tan literal.
La firma montó un barco de crucero gigante (haciendo alusión a la colección), alrededor del cual las modelos desfilaban como turistas. El transatlántico que fue nombrado “La Pausa”, igual que la casa de veraneo de Gabrielle Chanel en la Riviera Francesa, se llevó todas las miradas del espectáculo.
La línea se adaptó a la temática marinera con tonalidades azules, blancas y rosas. Las prendas van desde el típico cliché parisino, hasta el neoyorquino de los ’80 y ‘90. Como propuesta para el día se destacaron los pantalones wide leg de rayas verticales, sweaters finos, vestidos midi y largos, boinas y total looks vaqueros que incluyen cazadoras de cuero y jeans. Para la noche, vestidos vaporosos, algunos bordados y otros llenos de piedras y lentejuelas, y alguna que otra campera metalizada. La consigna era la silueta tiro alto en pantalones, y camisas y chaquetas con volumen en hombros y brazos que resaltan la cintura. El icónico tweed no pudo faltar, estuvo presente tanto en sacos y trajes de dos piezas como en boinas, siendo el protagonista de la pasarela.
Como todos los diseños de Lagerfeld, las prendas de esta colección están destinadas a ser éxitos de ventas, pero hay tres sweaters de color blanco con el anagrama de Chanel en rojo que abrieron el desfile e inmediatamente se convirtieron en indiscutibles objetos de deseo. El primero con cuello tipo ‘bote’ y con el anagrama bordado cerca del hombro, el segundo con cuello redondo y con el nombre del barco “La pausa”, y el tercero igual a éste pero de cuello alto. El revuelo que han tenido en las redes nos demuestra que la logomania definitivamente ha vuelto. Otra vez, Karl Lagerfeld no pudo haberlo hecho mejor.
Por: Michelle Mourahovsky
Fotos vía Elle
